Irónica y estúpida noche de domingo.

La vida no es irónica en sí misma? Te dan la vida, vives, descubres que es algo maravilloso y luego existe la muerte.

Y dentro de una de esas cosas maravillosas que en la vida se pueden encontrar son las coincidencias. Y una de ellas tuve hoy. 

Todo empezó cuando mi amigo J quería que lo acompañe a observar y ver lo que hace su chico, yo acepté pero antes teníamos que idear el plan perfecto para poder salir sin que mi madre nos ponga "peros" ni obstáculos, así que salimos con la excusa de ir al cine. A veces me pregunto la cifra exacta de adolescentes o jóvenes que hacen exactamente lo mismo, así podría consolarme y saber que no soy el único infantil que a los 22 años tiene que mentirle a su madre para salir (claro solo porque vivo bajo su techo como ella mismo lo dice). Llegamos al objetivo, la disco, donde el novio de J trabaja, entonces un amigo me llamó y de pronto se nos unió como debería de ser. Bien, entramos, bailamos, reímos, destruimos a los que nos molestaron, saqué unos chicles de mi zapatilla, mantuve la postura para bailar la zamba y también vi a algunas personas indeseables. En cualquier momento sabía que tendríamos que irnos, solo unas horas duraría todo esto. 

Al parecer tuve una descarga eléctrica con la electrónica, y no pude dejar de bailar hasta que decidieran poner alguna música latina u otra. Bailaba y bailaba, me detuve, vi hacia una esquina y miré hacia la otra, luego volteé mi mirada y alguien me saludó, no supe quién era, luego se me acercó y a los pocos metros supe que era mi hermanito A acercándose para saludarme, después de 6 años o algo más, conversando con él por el msn y luego por el facebook, fue una sensación extraña. No es que todos los días conozcas personas después de 6 años de comunicación prácticamente pero wow, fue genial, casi estancado pero aliviado, de que cosas raras pero posibles pasan, claro faltando 15 minutos para irme del lugar. No podía estar en mejor situación. 

Y luego el novio de J recién se había dignado a aparecer después de mucho tiempo que nos hizo esperar, a esperar me fui yo en la entrada, sentado en una silla, cuando un amigo L se apareció, presentándose y tratando de sacarme plan, naturalmente podría haberle dicho si,pero ya he madurado un poco y mas importante está mi voto de promesa y mi madre que me estaba esperando. Total el cine no duraría 5 horas y nosotros queríamos quedarnos mas tiempo. Y de tiempo no experimentaba sensaciones mezcladas que ponían una sonrisa amplia en mi boca.